La ministra ha destacado la fortuna para España de haberse cruzado en la vida de Carrière. «En primer lugar, porque contar con su talento es un lujo que nadie puede despreciar y, en segundo lugar, porque contar con su mirada es un privilegio que nos permite contemplarnos a nosotros mismos más limpiamente».
Cercanía a España
González-Sinde ha añadido que confía en que la cercanía de Carrière con España no desaparezca. También se ha referido a su libro de memorias Para matar el recuerdo, afirmando que «no han servido para eso, para matar el recuerdo, sino para dejarlo más vivo».
Carrière (Colombières-sur-Orb, Francia, 1931) es uno de los máximos exponentes del surrealismo francés, además de guionista de Buñuel, ha trabajado con otros directores españoles como Berlanga y con directores extranjeros como Milos Forman en proyectos de temática española. Estas circunstancias, según Cultura, prueban su pasión por la identidad y cultura españolas, convirtiéndole en excepcional embajador de ellas en el mundo.
Buñuel y Berlanga
Carrière se graduó en literatura e historia y publicó su primera novela con 24 años. Su colaboración con Luis Buñuel como guionista se inició con la película Diario de una camarera (1964) y siguió en varias películas, entre las que destacan Belle de Jour (1967), El discreto encanto de la burguesía (1972), El fantasma de la libertad (1974), Ese oscuro objeto del deseo (1977) y La vía láctea (1969). Ha colaborado también con otros directores españoles como Luis García Berlanga (Tamaño natural).
Es también autor de los guiones de El tambor de hojalata (1979), El regreso de Martin Guerre (1982), La insoportable levedad del ser (1988), Valmont (1989), Cyrano de Bergerac (1990), El húsar en el tejado (1995), Los fantasmas de Goya (2006) o Memoria de mis putas tristes (2010), entre otras. Además ha escrito una amplia obra ensayística centrada en el cine.