El primer premio, dotado con 30.000 euros, ha recaído en la Oficina de la Ciudad Histórica y de Rehabilitación [1] de Santiago de Compostela por su actuación en el casco histórico de la ciudad, como una «continuada intervención integral modélica, una filosofía y un modo de proceder en la actuación arquitectónica y urbanística en los ámbitos históricos, manteniendo por un lado su carácter monumental y, por otro, favoreciendo su habitabilidad». El proyecto premiado se ejemplifica a través de 13 intervenciones.
El segundo premio, dotado con 20.000 euros, reconoce el proyecto de rehabilitación de la Casa de la Moneda [2] de Segovia, presentado por el Ayuntamiento de Segovia, «por lo que ello supone de recuperación arquitectónica de un edificio diseñado por Juan Herrera, por la puesta en valor de este patrimonio industrial y de su explicación a través de un proyecto museográfico. Se trata de una intervención de gran envergadura tratada de manera respetuosa con el paisaje, la arquitectura y la historia de este complejo arquitectónico».
El Jurado, presidido por Ángeles Albert, directora general de Bellas Artes y Bienes Culturales, ha estado compuesto por Celestino García Braña, vicepresidente del Consejo Superior de los Colegios de Arquitectura de España; José Fariña, catedrático de Urbanismo de la Universidad Politécnica de Madrid; Pedro Navascués, vicedirector-tesorero de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando; María José del Toro, arquitecta del Instituto de Patrimonio Cultural de España; María Luisa Cerrillos, en representación del Grupo Ciudades Patrimonio de la Humanidad, y José María García de Miguel, por el Comité Español del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios de España (ICOMOS). Ha actuado como Secretaria Ángeles Alastrué, subdirectora general de Protección del Patrimonio Histórico.