Entre cajones

Biel Ballester Trio
Live In London
Le QuecumBar, 2006

La buena música es como las plantas entre las piedras, aprovecha cualquier mínimo resquicio para aflorar, crecer y dejarse ver; y cuando lo consigue nada puede con ella. Este trío mallorquín se dedica al gipsy jazz o jazz manouche, un estilo poco habitual y menos en España. Pero son buenos, y testarudos. Un día de octubre de 2005, mochila a cuestas, se marcharon a Londres y grabaron este directo en Le QuecumBar, un clásico del jazz londinense. Años después, se plantaban en el hotel donde se alojaba Woody Allen durante el rodaje de Vicky Cristina Barcelona para dejarle bajo la puerta de su habitación un resumen de sus mejores piezas. Y el resultado fue que don Woody les incluyó en la banda sonora. Su música es limpia, rítmica, fresca y virtuosa, realmente recomendable, con versiones de Reinhardt que ya las hubiese querido el maestro para él y composiciones propias que auguran muchos éxitos.

www.bielballestertrio.com

Feist
The Reminder
Cherry Tree, 2007

Leslie Feist es una canadiense de 34 años que descubrí cuando una tal Norah Jones dijo que su disco Let It Die era el que más le había gustado en 2005. No era una mala referencia y, efectivamente, su segundo disco –The Reminder– confirma que Feist apunta muy alto en un estilo de pop moderno y ecléctico. Su voz, a caballo entre la de la propia Jones y Lisa Ekdahl, es dulce y cálida; la instrumentación, acústica y trabajada, crea un ambiente íntimo y original. En So Sorry se reúnen todas sus virtudes y su 1234 les sonará a muchos de ustedes de algún spot publicitario (vale, lo digo: un spot de iPod) y de alguna serie de televisión. En suma, Feist es todo un descubrimiento, por distinta, por versátil, por su personalidad, porque aporta aire fresco a un estilo a veces demasiado enlatado. Me gusta.

www.listentofeist.com

Kenny Wayne Shepherd
10 Days Out (Blues From The Backroad)
WEA, 2007

El blues no ha recibido demasiada atención en las anteriores entradas de Melofilia, y espero compensar en parte esa injusticia con un disco dedicado a homenajear a los grandes bluesmen (y women) de la historia. Pases, pasen y vean, no exagero si digo que es un grandísimo álbum de una joven estrella del blues. Kenny Wayne Shepherd, dos veces elegido mejor guitarrista de blues, nos regala un CD/DVD/concierto/documental que no puede faltar en las estanterías de los aficionados a esta disciplina histórica. Kenny Wayne recorre durante diez días el corazón de Estados Unidos, reúne a grandes veteranos del blues y organiza un concierto histórico. Interminable la lista de artistas, indescriptible el ambiente, memorable la calidad. El documental incluye visitas de Shepherd a distintas estrellas del blues, entre las que destaca la improvisada reunión en la cocina de una Etta Baker de 93 años donde juntos tocan un entrañable rag. Realmente una joya, por tantas cosas que sólo pueden descubrirse comprándola. Pocas veces se puede recomendar un disco con tanta convicción.

www.kennywayneshpepherd.net

De sofá y copa de vino

Bill Frisell
Disfarmer
Nonesuch, 2009

Bill Frisell es un guitarrista de jazz más que reputado, con un estilo propio e inconfundible, lo que resulta especialmente difícil cuando este instrumento juega en la liga del jazz. En este disco, Frisell cuenta con música la historia que el fotógrafo Michael Disfarmer narra con sus imágenes de su Arkansas natal en los años cuarenta del siglo pasado. Y lo hace fusionando el estilo Americana (el folk más folk) con su particular estilo de jazz. Las dos Américas musicales juntas dan como resultado un disco de gran altura. Es casi música ambiente, pero muy trabajada y con excelentes intérpretes, con la que se puede leer, trabajar o reflexionar con uno mismo –aunque con algunos cortes del disco tendrán que levantar la cabeza y simplemente escuchar–, así que esta vez dejen que su pareja atienda a su madre y a los niños y regálense un rato para ustedes solos y solas.

El pasado también existe

Etta James
At Last!
MCA, 1961, 1999

Jamesetta Hawkins, doña Etta James, el Rhythm & Blues en esencia. ¡Cuántas canciones de toda la vida han salido de la discografía de esta señora! Tough Mary, At Last, I Just Want To Make Love To You (a esto llamo yo canción con mensaje), tantas… A veces, estos artistas caen en el olvido, pero para eso está esta vitrina digital. Un homenaje a Jamesetta y a su sensualidad, su ritmo, su fuerza, su voz cálida, poderosa y tan fácilmente identificable con aquella época. Les invito a que bailen agarrados con su música, ya no olvidarán a Mrs. Etta James.

¿Clásicos? ¿Qué clásicos?

Frank Schumann
Concierto para Piano y Orquesta en La Menor
London Philharmonic Orchestra / Baremboim / Du Pré
EMI Classics

Seguimos avanzando en nuestra colección de clásicos y propongo hoy una de mis piezas favoritas, el concierto para piano de Schumann. Los primeros compases del primer movimiento resultarán familiares para muchos y sirven de presentación para una de las referencias en el repertorio de los grandes conciertos de piano. Romántico por excelencia, Schumann hizo que su único concierto para piano transmitiese sensibilidad y sentimiento por encima de cualquier otra cosa. El tema principal sirve de diálogo entre el solista y la orquesta y con esa conversación espero que disfruten.

La grabación que he seleccionado tiene como solista a Daniel Baremboim, acompañado por la London Philharmonic Orchestra, una de las grandes. Baremboim se siente cómodo en las composiciones románticas y eso se nota en esta interpretación sentida y vigorosa. Además, el disco incluye otra pieza de Schumann, su concierto de violonchelo, interpretado por Jacqueline du Pré, una de las mejores violonchelistas del siglo XX y, a modo de anécdota, pareja de Baremboim durante muchos años. Ya me contarán qué les ha parecido.

Ustedes mandan

4Hero
Two Pages
Polygram, 1998

Nuestro asiduo Peep Jordan me sugiere este disco y lo describe como “música electrónica tocada con instrumentos acústicos”. Con esa presentación era obligatorio escucharlo cuanto antes y traérselo a ustedes a este nuevo estrado de sus recomendaciones. Y, efectivamente, música electrónica, en acústico, y añado que con recuerdos chill out y de jazz. Música de elites y de gran calidad, amigo Peep, gracias por el descubrimiento.

Me pide una lectora –Kate Hartford– que dedique algún guiño al mundo de las bandas sonoras de películas. Confieso que no es lo mío. Hay varias que me gustan, pero no hay demasiadas en mis estanterías. Por eso pido su colaboración para poder dedicar una entrada a la música en el cine. Envíenme sugerencias y recomendaciones, incluso reseñas comentadas y gustosamente las publicaré para compartirlas con todos.

El dibujo que hoy nos regala  Iván Solbes nos recuerda lo difíciles que son algunas cosas, y que por complicadas e imposibles que parezcan hay que luchar por ellas. Con paciencia, trabajo, ilusión y con gente a tu lado que te ayude. Hay tantas flores que cuidar, ¿verdad? Además, simboliza lo que pretende Melofilia: encontrar flores entre las rocas.