Si es usted uno de esos afortunados viajeros que tienen previsto acercarse a la capital francesa a lo largo de estos próximos meses, seguro que le viene bien este resumen de los locales que en opinión de la crítica parisina “no debe uno perderse bajo ningún concepto”.

Saturne. Una nueva y elegante tienda de vinos y “bistrot à vins” situada cerca de la Bolsa de París que se ha convertido en el sitio de moda del momento. Sutilmente decorado en tonos sepias, techo de cristal, suelo de tablas de roble, finas estanterías para los vinos, una moderna cocina a la vista tipo escandinavo y un jovencísimo chef de 23 años al frente de ella, ofreciendo sus novedosos menús degustación con platos como una ensalada de camarones crudos y sardinas al vinagre de Savagnin, hierbas frescas con flores de capuchina o mollejas de ternera con salsa de ostras frescas y champiñones.
Restaurant Saturne, 17 rue Notre Dame des Victoires. 33-1-42-60-31-90

Le Minipalais. Uno de los pocos establecimientos de esta ciudad en los que uno puede saltarse la costumbre local de tener que comer antes de las dos o cenar de ocho a diez y media de la noche. Esta es probablemente una de las razones por las que este renovado establecimiento hermosamente decorado por los diseñadores Gilles Patrick y Bossier Dorothée está en pleno auge. Sirven, de forma continuada desde el mediodía hasta la una de la madrugada, un menú diseñado por el chef de tres estrellas Eric Frechon (del Hôtel Le Bristol) que incluye un fabuloso y siempre disponible sándwich de langosta de roca, un sabroso steak tartar o una tarta de higos frescos con crema helada de almendras.
Le Minipalais, Avenue Winston Churchill. 33-1-42-56-42-42

L’ Assaggio. Si anda usted de shopping o simplemente de turisteo por el centro de la ciudad, este local elegantemente redecorado le vendrá bien para reponer fuerzas. Situado a muy pocos metros de la tienda principal de Chanel, el recién incorporado chef Gianluca Re Fraschini prepara una excelente y confortable comida italiana con propuestas como burrata con tomates cherry asados, risotto al azafrán o linguini con almejas y coles de Bruselas, una deliciosa combinación.
L’Assaggio. Hotel Castille, 33 rue Cambon. 33-1-44-58-45-67

Y si lo que busca es una comida rápida o una deliciosa cena cerca del Louvre, pásese por el Spring para tomar algo en la barra de vinos de su sótano, un acogedor espacio increíblemente bien restaurado perteneciente a una antigua casa del siglo XVII donde el chef Daniel Rose le ofrecerá, entre otras cosas, su delicioso guiso de cordero y judías blancas con setas.
Spring Wine Bar. 6 rue Bailleul. 33-1-45-96-05-72

En el mismo barrio se encuentra también el nuevo La Régalade Saint- Honoré, la sucursal de “la orilla derecha del Sena” del famoso La Régalade (con su dificultoso emplazamiento en el profundo distrito 14), una de las mejores bristo de París donde por 33 euros puede uno tomar un menú de tres platos al estilo de los grandes, que incluye sugerencias como el salmón marinado con ensalada de hierbas, la panceta de cerdo del fabricante vasco Eric Ospital sobre una cama de lentejas verdes de Puy, o el soufflé Grand Marnier.
La Régalade Saint-Honoré, 123 rue Saint-Honoré. 33-1-42-21-92-40

Y si después de todo un día callejeando le pasa factura el esfuerzo y está a punto de sufrir un bajón de azúcar, nada mejor que acercarse al establecimiento del maestro chocolatero Jean Paul Hevin, el nuevo Chocolate Bar, un espacio situado en el interior de su tienda de la rue Saint-Honoré donde ofrece degustaciones de diferentes modalidades de chocolates en grano seleccionados para satisfacer todo tipo de necesidades, como por ejemplo la de abrir el apetito a mediodía, antes de almorzar, con alguno de sus famosos chocolates con sabor a queso, añadir un toque de energía a media tarde con una variedad de plátano y pimienta o acabar la tarde con un buen afrodisíaco a base de un chocolate con jengibre y especias.
Chocolate Bar Jean-Paul Hevin. 231 rue Saint Honoré. 33-1-55-35-35-96

Lao Tseu. Durante años, el restaurante asiático por defecto para los aficionados al mundo de la moda era el conocido Dave, hasta que Marc Jacobs abrió su tienda en el Boulevard Saint-Germain, a la otra orilla del Sena y la clientela se pasó al Lao Tseu, un pequeño pero muy elegante restaurante chino con un encantador dueño que posee una habilidad extraordinaria para tratar a la crème de la crème parisina, desde un diseñador a un ministro del gabinete francés con su esposa (¿o amante?) pasando por un grupo de condesas cuidadosamente peinadas y enfundadas en lujosos vestidos.
Lao Tseu, 209 Boulevard Saint-Germain. 33-1-45-48-30-06

Si lo que le apetece es pasar un rato divertido en un lugar diferente, pruebe el recién abierto “bristo contemporáneo” Playtime, un establecimiento en el que su curiosa decoración tipo años 60 (a Tom Ford le encantaría) compensa con creces su complicada ubicación entre las Gare du Nord y Gare de l’Est, las estaciones ferroviarias del norte y del este de París. El hiperactivo chef Jean-Michel Rassinoux le ofrecerá unos extraños platos de “cocina francesa contemporánea global”, con combinaciones como un batido de leche de soja y té verde, dorada sobre un lecho de orzo con obleas cafre o tomates asados a la vainilla. Eso sí, el público es muy joven y muy divertido.
Playtime. 5 rue des Petits-Hotels. 33-1-44-79-03-98

Y por último, para descansar de la ajetreada visita a París, antes de volver a casa no se pierda un fin de semana en la fabulosa “casa de huéspedes”, para nosotros casa rural Le Clos du Léthé, situada a las afueras del pueblecito de Uzès, en la región de Languedoc-Rosellón, y aproveche para ir a cenar a L’Artemisa, donde Guillaume Foucault, que anteriormente trabajaba con Pascal Barbot en L’ Astrance de París, está haciendo por su cuenta una cocina contemporánea increíblemente buena, creativa y muy inteligente.
Le Clos du Léthé. Hameau de St –Médiers. 30700 Montaren y Médiers San. 33-4- 66-74-58-37
L’Artemisa. Chemin de la Fontaine aux boeufs. 30700 Uzès. 33-4-66-63-94-14