La donación permitirá al Smithsonian transformar su actual Auditorio Carmichael, de casi 50 años de edad y con capacidad para 270 espectadores, en un moderno teatro con instalación de nuevas tecnologías, como la proyección digital en 3-D y será utilizado también para conferencias, simposios y conciertos, pasando a llamarse Teatro Warner Bros cuando sea inaugurado el próximo año.
El espacio dispondrá además del equipamiento tradicional necesario para proyectar películas antiguas en su formato original de 35 mm. La historia del cine en los Estados Unidos reproduce el recorrido de una industria que empezó como generadora de un nuevo entretenimiento y fue creciendo hasta llegar a convertirse en una gran empresa global.
Una colección histórica
El legado de la Warner complementa la colección ya existente del propio museo sobre entretenimiento e historia de la fotografía que incluye disfraces, utilería, guiones de cine y televisión, cámaras, proyectores y equipos de edición. Entre las piezas más destacadas se incluye una lente rotatoria para cine de 1890, dibujos de la primera película de animación de Mickey Mouse realizada en 1928, una de las cámaras Technicolor utilizadas en 1939 para filmar El Mago de Oz o las zapatillas de rubí que lució Judy Garland en esa película.