Esta exposición, ha explicado Niebla, ilustra que "Rivera se acercó al cubismo de manera gradual, y no como ruptura con el modernismo, y de hecho su punto de partida no fueron ni Picasso ni Braque, sino las pinturas de El Greco que vio en España en 1907".
Grandes exposiciones
Además de la muestra de Rivera, la Fundación ha producido grandes exposiciones internacionales sobre Joseph Beuys, la obra de Juan Gris como ilustrador, el artista cubano Wifredo Lam y la colección de tallas medievales de la familia Godia que se conserva en El Conventet de Barcelona.
La temporada de la fundación gerundense se abre con Joseph Beuys: Diary of Seychelles, que reúne por primera vez todo el material desglosado en fotografías, instrumentos, objetos, filmaciones y escritos referentes a la plantación del "coco de mer" y del "coconut" que Beuys realizó en 1980 en Seychelles.
Esta acción fue el primer ensayo de plantación como paradigma de la fusión entre el ser humano y la tierra, que estableció las bases de otras conocidas performances, como las de los 7.000 robles que instaló en la Documenta de Kasel XI.
Tallas religiosas
Entre abril y mayo próximo se podrán ver una cincuentena de tallas religiosas datadas entre los siglos XII y XVI procedentes de la colección El Conventet, con las que el comisario, Gerardo Boto, reflexiona sobre el verdadero sentido que tomaron las representaciones escultóricas de Dios, la Virgen y los santos en el interior de los templos cristianos.
A partir de mayo, en la sede de la Fundación se podrá descubrir una de las facetas menos conocidas del cubista Juan Gris: sus inicios como ilustrador, a partir de unos sesenta dibujos originales realizados entre 1904 y 1912, un tercio de su vida poco estudiado y que desvela una parte relevante de su trayectoria.
El presupuesto de la temporada asciende a cerca de 900.000 euros, aunque la Fundación ha congelado su intención de adquirir un inmueble para tener una sede permanente en Barcelona, como había anunciado años atrás.