La nueva sede, proyecto del estudio de arquitectura de Carme Pinós, convertirá a la capital de la comunidad aragonesa en la séptima ciudad española que albergará un CaixaForum. Juan Alberto Belloch, alcalde de Zaragoza, señaló que el nuevo centro “es un argumento decisivo” en el eje de turismo religioso-cultural que la ciudad está diseñando de cara a conseguir la Capitalidad Europea de la Cultura en el año 2016.
En pleno centro urbano
CaixaForum Zaragoza estará situado en pleno centro urbano, a pocos metros la Aljafería, sede de las Cortes, y del edificio Pignatelli, sede de la Diputación General de Aragón, entre otras instituciones. El centro pasará a formar parte de los 16 equipamientos culturales de primer nivel con que contará Zaragoza en 2016.
La parcela donde hoy se ha iniciado la edificación cuenta con una superficie de 4.407 metros cuadrados. La superficie construida total con que contará el centro social y cultural superará los 6.000 metros cuadrados.
Pinós plantea un edificio “abierto a la ciudad, concebido para que los visitantes se sientan parte de él”. La arquitecta barcelonesa plantea una ambiciosa combinación entre la introspección necesaria para las salas de exposiciones y su conexión con la ciudad gracias a la singularidad de la forma del edificio y la creación de espacio público que supondrá.
Monumental escultura
El edificio se desdobla en dos estructuras geométricas elevadas de grandes dimensiones que albergarán las salas de exposiciones, generando un nuevo espacio público enmarcado en el nuevo parque El Portillo. Gracias a esa estructura singular, CaixaForum Zaragoza “levitará”, convirtiéndose en un monumental elemento escultórico dentro del nuevo pulmón verde de 45.000 metros cuadrados de superficie con que contará la capital aragonesa.
Las dos grandes salas de exposiciones se encuentran suspendidas a distintos niveles, de modo que los visitantes podrán contemplar la ciudad al desplazarse de una a otra. En lo más alto se situarán la cafetería y el restaurante, con vistas al nuevo parque urbano. En el lado contrario, y gracias a la diferencia de niveles entre salas, se creará una terraza que tendrá vistas panorámicas a la zona de la Expo 08. Gracias a esta estructura, la planta baja podrá ser abierta y transparente, integrando el amplio vestíbulo de entrada y la tienda-librería. Un jardín dará acceso al auditorio, situado en el subsuelo.
Está previsto que las obras se prolonguen por espacio de unos treinta meses, por lo que el nuevo centro social y cultural podría abrir sus puertas en el primer semestre de 2013. Para entonces, “el centro será una realidad plenamente integrada en Zaragoza que redundará en el bienestar y crecimiento de todos los ciudadanos”, señaló Isidro Fainé, presidente de la Fundación “la Caixa”.