Para este proyecto, una coproducción del CA2M y el Museo Carrillo Gil de México que cuenta con la colaboración de Casa Sefarad Israel, se exhibe una primera serie de vídeos como House Hold (2001) o Moby Dick (2000), donde el estudio de la figura paterna dentro de la familia se convierte en el punto común. La obra Tree House Kit (2005), probablemente uno de los vídeos más característicos del artista, aparece en el espacio del CA2M como instalación principal. Un árbol de madera de cuatro metros convierte al museo en un escenario de naturaleza artificial.
Para completar la exposición, se exhiben dos de sus últimos vídeos: Second Nature (2008), presentado en el Skulptur Project Münster, y I’d give it to you if I could, but I borrowed it, un vídeo que se reproduce sobre una bicicleta estática y que el visitante puede ver si participa tiene activamente con el esfuerzo de su pedaleo.
Entre lo personal y lo social
Desde principios de los años noventa, Guy Ben-Ner ha utilizado como metodología de trabajo filmaciones donde él mismo y su familia actúan como protagonistas. El escenario de trabajo en muchas de sus obras es su propio apartamento familiar, modificado rústicamente para los rodajes con una estética low tech. Intercambiando los roles de actor y director, la inverosimilitud de las escenas se mezcla con las relaciones reales existentes entre los personajes más allá del set de grabación. A pesar de que pareciera seguir un guión específico, las preguntas abiertas dentro del propio proceso son constantes, como si nunca estuviera seguro del final.
El análisis de pasajes literarios y cinematográficos le permite explotar las convenciones de la narración fílmica: cómo contar una historia, cautivar al público a través de una narrativa, mantener un grado de tensión y entretenimiento… Al mismo tiempo, contamina la magia de la ficción mostrándonos sin coerciones las entrañas de lo grabado, sin temor a desvelar trucos.
Momentos cómicos
En sus obras, los escenarios reales se combinan con momentos cómicos, donde el absurdo se convierte en la única manera de reflexionar sobre una situación desesperada. Su figura disparatada e impávida a la vez nos hace pensar en el artista como un Buster Keaton moderno. Igual que el mítico actor, Guy Ben-Ner hace algo más que entretener a la audiencia.
Sin tomar una posición concreta, Ben-Ner nos habla constantemente de la ética y la moral con la misma naturalidad con la que deniega cualquier compromiso o posicionamiento ante estas convenciones, más allá de la propia práctica artística. Toma prestadas historias, no tanto por una afición fetichista sino como mero ejercicio de supervivencia. Sus metodologías son tan heterogéneas, las fuentes de inspiración tan diferentes, que todos los géneros son válidos: del documental a la ficción, del vídeo arte al cine, cualquier excusa es pretexto para poder narrar una historia.
Guy Ben-Ner (Ramat Gan, Israel, 1969) vive y trabaja en Tel Aviv. Su filmografía oficial empieza en 1997 con vídeos cortos donde desarrolla la idea del espacio doméstico, la cual mantendrá a lo largo de gran parte de sus obras. Desde entonces, ha producido varios vídeos que han formado parte de numerosos festivales, exposiciones colectivas y muestras individuales en instituciones como The Museum of Modern Art, Nueva York; The BronxMuseum, Nueva York; Museum of Contemporary Art, Montreal; Contemporary Arts Center, Cincinnati o Israel Museum, Jerusalén. Con Treehouse Kit representó a Israel en la Bienal de Venecia del año 2005. Entre las últimas exposiciones individuales destacan Real Life: Ron Mueck and Guy Ben-Ner, National Gallery of Canada, Ottawa, (2008) o la muestra individual que el Mass MoCA de Boston le ha dedicado este año. |
Móstoles (Madrid). Doblar a lo largo de la línea. CA2M (Centro de Arte Dos de Mayo).
Comisaria: Ruth Estévez.
Del 16 de diciembre de 2009 al 28 de febrero de 2010.