Para mostrar las aproximadamente mil obras que componen esta relectura se ha triplicado el espacio expositivo (ubicado en la 4ª planta del edificio Sabatini) dedicado a este período del arte de vanguardia. Hay que destacar el importante número de piezas que se exhiben por primera vez, algunas de ellas procedentes de importantes legados y donaciones, y otras adquiridas directamente por el Museo.
Importantes legados
Entre las obras expuestas hay que destacar las que componen los importantes legados de Brassai y Morris Louis, así como las compras recientes realizadas por el Museo: el Archivo de Alberto Greco en España, una importante serie de dibujos arquitectónicos de Roberto Matta, un numeroso material letrista y situacionista o las famosas fotografías realizadas en España en los años 50 por el fotógrafo Eugene Smith.
Entre las obras que han sido cedidas en depósito al Museo en los últimos años, y que también se podrán ver en la muestra, destaca el depósito de la Colección Onnasch, que ha cedido 27 obras de autores de la talla de Clyfford Still, Franz Kline, Rauschenberg, Christo o Georges Brecht. También hay que mencionar el depósito de Millares y Rivera, o el de la Colección Cisneros Fontanals Art Foundation, con piezas de arte concreto latinoamericano entre las que destacan las de Lygia Clark o Franz Weissmann. Por otro lado, se podrá contemplar la Colección de François y Mady Letaillieur sobre letrismo.
Informalismo representado
Además, la cuarta planta acogerá una mejor y más completa representación del informalismo de los años 60 (Tàpies, Saura, Millares, el Grupo de Cuenca…) y de la figuración política española (Arroyo, Equipo Crónica y Equipo Realidad). Se trata de ofrecer una visión novedosa con obras fundamentales de estos artistas que no han sido exhibidas anteriormente.
En esta presentación se concede especial importancia al material fotográfico y al cine. Se podrán ver películas de cine letrista, pasando por algunas piezas del Hollywood de los 50, como La ventana indiscreta (1954) de Alfred Hitchcock, que alude a la hegemonía de la cultura de masas en ese período, o películas situacionistas como la emblemática de Debord La sociedad del espectáculo (1973). Otra película, en esta ocasión Bienvenido Mr. Marshall (1953), del recientemente fallecido Luis García Berlanga, se proyecta en una sala identificada con una cierta españolidad popular. Dos películas del director francés Alain Resnais, Noche y niebla (1955) y La guerra ha terminado (1966), abren y cierran el recorrido.
Tres núcleos principales
La exposición se abre con el lienzo de Picasso Monumento a los españoles muertos por Francia (1946-1947), una pieza política que refleja el momento en que arranca el recorrido. A partir de ahí, aunque no existen secciones estancas en este largo camino por las décadas de los cuarenta a los sesenta, atendiendo a un orden cronológico se establecen tres núcleos principales:
-El primero aborda la inmediata posguerra en dos entornos culturales y políticos diferentes: Europa, principalmente París y España.
-El segundo núcleo aborda el periodo «clásico» del modernismo internacional y sus múltiples disidencias.
-El último núcleo de este itinerario nos sitúa en la década de los sesenta.
Como punto final, y anticipo a lo que serán los discursos del arte de períodos siguientes, este recorrido por las décadas que suceden a la Segunda Guerra Mundial concluye con una selección de autores y obras del contexto europeo de finales de los sesenta y comienzos de la década siguiente. La literatura, el teatro, la música, el cine, son consanguíneas a estas prácticas artísticas y no meras alianzas estratégicas, como se aprecia en la obra de Öyvind Fahlström, Robert Filliou, Brecht o Marcel Broodthaers, entre otros.
En resumen, un recorrido por 29 salas en las que comparten protagonismo Picasso, Miró, Duchamp, Cage, Saura, Miralles, Still, Kline, Rauschenberg, Christo y Tomlin, entre otros, y finaliza con la proyección de la película que da título a la muestra, La guerra ha terminado (1966), de Alain Resnais.
Celebración repleta de personalidades
A su llegada al MNCARS, la Reina fue recibida por la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado, la ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, el ministro de Educación, Ángel Gabilondo, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, el ex presidente del Gobierno Felipe González, el presidente del Real Patronato del Museo, Guillermo de la Dehesa, y el director del Museo, Manuel Borja-Villel.
A continuación, Doña Sofía accedió al interior del edificio, donde recibió el saludo de los ex ministros de Cultura Javier Solana, Carmen Alborch y Carmen Calvo. Posteriormente fue saludada por los vocales del Real Patronato del Museo, la conservadora jefe del Área de Colecciones, Rosario Peiró, y los coleccionistas depositantes de las obras, Ella Cisneros (depositante de las obras de artistas latinoamericanos), Germana Ferrari de Matta (viuda del pintor Roberto Matta), María Lourdes Bettencourt de Castro (depositaria de las obras de Alberto Greco), François y Mady Letailleur (depositarios de las obras de «letristas») y el representante de la Fundación Hartumg.
20 años y una ley en proyecto
En 1990, el Centro de Arte Reina Sofía era reinaugurado como Museo Nacional. Esta doble fundación, situada entre la apertura del centro de arte y la memoria del museo, conforman la identidad de la institución. Veinte años después, el Museo Reina Sofía celebra su aniversario cruzando ambas condiciones, intensificando el programa de mediación y propiciando nuevas lecturas tanto de las exposiciones como de la colección.El espectador es el referente en este conjunto de actividades, cuyo objetivo principal es transformar la experiencia en el museo, transitar de una recepción visual a otra más conversacional y participativa. Con este fin común, artistas, investigadores e historiadores han sido invitados a reinterpretar junto al público las exposiciones y la colección a través de diferentes formatos, desde visitas y conferencias hasta performances y conciertos. Además, coincidiendo con este aniversario, en el último Consejo de Ministros se anunció la tramitación de una ley propia para este museo, similar a la del Museo del Prado, que permita una mayor agilidad en los trámites, poner en marcha modelos de autogestión, desarrollar proyectos propios, etc. En la rueda de prensa previa al acto de inauguración de la nueva zona expositiva, la ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, se ha referido a esta ley como “una de las prioridades del Gobierno antes de que acabe la legislatura”. |
Madrid. ¿La Guerra ha terminado? Arte en un mundo dividido (1945-1968). Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía.
A partir del 24 de noviembre de 2010.
Para celebrar este XX aniversario, el Museo abrirá sus puertas gratuitamente los días 26, 27 y 28 de noviembre.