Grandes Encuadernaciones en las Bibliotecas Reales

Una selección de los fondos de la Real Biblioteca, el Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial, Monasterio de Santa María la Real de Las Huelgas de Burgos, el Monasterio de las Descalzas Reales y el Real Monasterio de la Encarnación integran esta colección. Completan la muestra obras de arte como armas, alfombras y relojes que ayudan a entender la encuadernación como elemento fundamental de la cultura de corte.

Exquisitos detalles

En concreto, en esta exposición se aborda una de las artes del libro –la encuadernación o arte ligatorio– que tiene una relevancia singular en la historia de las grandes bibliotecas. Los reyes españoles han sido importantes coleccionistas de libros y mecenas de las letras y de las artes. Por eso existen numerosos testimonios de sus librerías personales, no solo a través de los libros si no de los exquisitos detalles que permiten en todas las salas de esta muestra asociar las distintas expresiones de las artes decorativas.

En resumen, una buena oportunidad para seguir a través de todas estas obras de arte el desarrollo artístico de manuscritos, impresos, encuadernaciones u objetos no librarios reunidos por manos expertas para las colecciones de los palacios y monasterios reales. También merecen destacarse las labores de restauración de estas piezas únicas realizadas en los talleres de Patrimonio Nacional.

Novedoso planteamiento

La gran novedad de la muestra radica no sólo en la calidad de los fondos expuestos, sino también en su planteamiento: por vez primera se estudia la encuadernación entendida como un elemento más del lenguaje de la Corte y un elemento identificativo de la persona o la institución que custodia el libro. Por ello se rompe también con el eje cronológico tradicional y se crea una exposición sincrónica, en la que lo importante es entender las funciones que la encuadernación ha cumplido a lo largo de la historia.

La exposición se organiza en torno a tres ejes: ‘Procedencias’, ‘Funciones’ y ‘Técnicas decorativas’, y se inicia con un audiovisual, de forma que el visitante pueda sumergirse en la Real Biblioteca y su entorno. Otro aspecto muy interesante del montaje es que se puede tener una visión de 360 grados de los libros expuestos.

Diez salas

La Primera Sala trata del origen de la Real Biblioteca y la procedencia de sus libros y fondos. Las obras parten de tres fuentes principales: los libros de la propia Familia Real, con excepcionales obras y libros infantiles correspondientes al reinado de Alfonso XIII y la reina Victoria; en segundo lugar, ejemplos de las bibliotecas de los eruditos Diego Hurtado de Mendoza, Nicolás Azara o del encuadernador real de Parma, Giambattista Bodoni; y, por último, los fondos procedentes de la nobleza, entre los que destaca la colección del conde de Gondomar.

La Segunda Sala está dedicada a las ‘Homologaciones’, esto es, el uso del lenguaje decorativo como hilo conductor y su coincidencia en todo tipo de objetos presentes en la vida de la corte: sillas, ex libris, relojes o atriles. La reunión de estos ejemplos permite entender los diferentes estilos y su concordancia, además de la coherencia estilística y la profundidad de la colección real. En esta Sala se muestra cómo el continente y la imagen de las encuadernaciones son capaces de transmitir el conocimiento que los libros esconden.

Monasterios

En la Sala Tercera –’Retiros espirituales’– se recogen los fondos procedentes de los monasterios de fundación real. Están expuestos libros que pertenecieron a la princesa Juana de Castilla, la reina Margarita de Austria o la reina Leonor, esposa de Alfonso VIII. Destaca en este espacio el tintero de santa Teresa, del siglo XVI, conservado en el Monasterio de El Escorial.

Bajo el sobrenombre de ‘Ceremonias’, la Sala Cuarta está destinada a las funciones que los libros desempeñaban en la vida y los rituales de la Corte. En ese sentido son magníficos testigos del protocolo real de cada época. Especial interés ofrece el excepcional estuche de plata que contiene el ‘Álbum de firmas que los alcaldes presidentes de España dedican a Sus Majestades los Reyes, don Alfonso XIII y doña Victoria Eugenia con motivo de su enlace matrimonial’.

El ‘Lujo’ es el protagonista de la Sala Quinta, en la que se muestran las encuadernaciones realizadas en prestigiosos talleres para reyes y príncipes. Aquí se descubre el carácter internacional de la encuadernación en el ámbito de las casas reales europeas. El magnífico tapiz de la Coronación de la Virgen se contrapone a la excepcional cubierta del Misal de Isabel la Católica, del siglo XV.

En pergamino

La Sala Sexta está dedicada al ‘Candor’ o la sencillez de la encuadernación en pergamino. El interés de estas encuadernaciones radica en que su estructura revela las diferencias geográficas, técnicas y económicas «sufridas» por los libros, lo que hace posible entender el camino de un ejemplar que puede ser elaborado en un lugar, «ligado» en otro y editado en un tercero.

Los hierros decorativos llenan el espacio de la Sala Séptima, en la que se muestran hasta 16 diferentes tipos de hierro, sobredimensionados y representados en las paredes, y, con un espectacular montaje, se vuelve al ambiente de palacio. Uno de los valores de la muestra es que, frente a montajes que utilizan salas de forma inerte, el palacio es aquí un elemento más del montaje expositivo.

La Sala Octava –’Serial vs. Único’– ofrece una original presentación para contemplar las publicaciones anuales, en concreto las guías de forasteros y los estados militares que se guardan en la Colección Real. Encuadernados con ricos e innovadores modelos, constituyen una serie de magníficas obras.

Reinados

‘Cortes’ es el título de la Sala Novena. Gracias a la presentación artística propuesta se pueden apreciar en los libros sus cortes dorados, labrados o miniados que los enriquecen, además de tener una doble finalidad: la utilización estética y la preservación de los libros. Esta sala se completa con las encuadernaciones «de pasta valenciana» –de color verde– y de “pasta española” –marrón– con las que se imita la textura de los mármoles.

La Sala Décima, con la que concluye la exposición, está dedicada a la ‘Hegemonía’ y en ella se muestran los fondos clasificados por reinados, comenzando por Isabel I y alcanzando a Juan Carlos I. Estos fondos muestran cómo la encuadernación se asociaba a la identificación de sus propietarios.