que tuvo lugar entre los pasados días 30 de enero y 30 de agosto, y que visitaron un total de 43.032 personas, constituyendo uno de los mayores éxitos de asistencia del centro desde su apertura.
Cuatro años renovables
Fue durante el transcurso de esta muestra cuando se iniciaron las negociaciones para conseguir el depósito de algunas de las obras al museo. La satisfacción y la confianza de Grothe y de su familia con la institución mallorquina han sido decisivos a la hora de decidirse a dejar la custodia de estas obras por un período de cuatro años renovables.
El depósito ha sido informado favorablemente por la Comisión de Adquisiciones y aprobado por la Comisión Ejecutiva de Es Baluard. Su directora, Cristina Ros, ha expresado a la familia Grothe su agradecimiento por su generosidad y porque, con este gesto, obras de un interés primordial "sin duda contribuyen a enriquecer notablemente la colección de Es Baluard y lo convierten en uno de los museos de España con mejor representación del que es uno de los artistas esenciales de la segunda mitad del siglo XX". Con la cesión de Hans Grothe ya son cuatro las colecciones que han depositado obra en el centro en los últimos meses.
Obras maestras
Tres pinturas y una escultura, valoradas aproximadamente en tres millones de euros, componen la cesión de Hans Grothe. Se trata de las pinturas Schwarze Flocken (Copos negros), Shebirat Ha Kelim y Am Anfang (Al comienzo), y la escultura Frauen der Anthike (Mujeres de la antigüedad).
Las cuatro obras son de una gran relevancia y representatividad en la trayectoria de Kiefer. Todas ellas son ilustrativas de la manera en que el artista recupera la memoria histórica: utilizando materiales como la ceniza, la tierra, el plomo, el hierro, el óxido o ramas. Precisamente, dos de ellas (Frauen der Anthike y Am Anfang) se pueden contemplar actualmente en la exposición Paisajes Cruzados. Miradas a la colección de Es Baluard [1].