Dalí, Gregorio Prieto, Rafael Canogar, Darío Villalba, Pablo Serrano, Fernando Zobel, Josep Guinovart, Gustavo Torner o Lucio Muñoz son algunos de los 22 artistas presentes en la donación, miembros significativos del panorama artístico español, la mayoría de entre los años 50 y 80.
Cultura y sensibilidad
Mujer dotada de una gran cultura y sensibilidad para las artes plásticas, Mordó (Salónica, Grecia 1899-Madrid, 1984) fue, por su sentido de la organización y capacidad en el trabajo, un ejemplo a seguir por toda una nueva generación de galeristas. A ella se debe también en gran medida el afianzamiento y la difusión del arte español de nuestro tiempo.
En cuanto a Helga de Alvear, una de las personas más influyentes dentro del mundo del arte español, nació en Alemania pero se estableció en nuestro país en 1957. En 1979 comenzó su trabajo en la galería de Mordó, con quien colaboró estrechamente hasta su muerte en 1984 y de quien procede el legado que ahora ha donado a la Academia. Además, De Alvear también ha donado su gran colección privada a Extremadura, en concreto al Centro de Artes Visuales de Cáceres Fundación Helga de Alvear [1].
Académicos
El lote de la donación Juana Mordó-Helga de Alvear está compuesto por obras de algunos de los pintores más representativos de los años 50 a los 80 y dos pequeñas esculturas de Pablo Serrano. Varios de los artistas de esta colección han pertenecido o pertenecen a la Real Academia como Manuel Rivera, Rafael Canogar, Darío Villalba, Joan Hernández Pijoan o Gustavo Torner.
Hoy, durante la presentación de la exposición, Rafael Canogar (Toledo, 1935) se reencontraba, emocionado, con cuatro de sus obras a las que apenas recordaba y a las que había perdido la pista hacía más de 30 años y, cámara en ristre, comentaba que en cuanto pudiera comprobaría si estaban recogidas en su Catálogo Razonado Digital [2], un trabajo que compendia la totalidad de su obra desde 1948 hasta 2007.
La brecha de la modernidad
Dentro del legado hay que contar con tres obras de artistas anteriores a las vanguardias de los años 50: una plancha de cobre de Salvador Dalí, titulada La vida es sueño y dos dibujos, una obra surrealista de José Caballero y otra del pintor manchego Gregorio Prieto, que vienen a dar testimonio de la mejor pintura que abrió la brecha de la modernidad en España.
La Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, con sus más de 250 años de existencia, cuenta con una magnífica colección de pinturas, esculturas, dibujos y objetos artísticos, que comprenden desde el siglo XVI hasta nuestros días. Las donaciones de la Corona primero y las de amigos y admiradores de la corporación académica después, han ido incrementando la colección, que posee un gran número de obras maestras. El Mordó-Alvear es el primer gran legado de arte contemporáneo que recibe la Academia.
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Un legado con 22 artistas Rafael Canogar (4 obras), Manuel Rivera (5) Darío Villalba (6), Daniel Quintero (1), Salvador Dalí (1), Bonifacio (3), Pablo Serrano (3), Josep Guinovart (5), Gregorio Prieto (1), José Caballero (1), Antonio Lorenzo (1), Francisco Farreras (2), Joan Fontcuberta (2), Lucio Muñoz (3), Joan Hernández Pijuan (2), Gustavo Torner (2), Gerardo Rueda (1), Fernando Zobel (1), Mitsuo Miura (6), Matías Quetglas (1), José Luis Fajardo (2) y Jacinto Salvadó (3).
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Madrid. Legado Mordó-Alvear. Real Academia de Bellas Artes de San Fernando [3].
Del 26 de octubre al de 2011 al 8 de enero de 2012.