Para un pintor, el papel es un elemento primigenio y básico en su creación. Tras la idea, es el material primero donde visualiza el concepto. En el papel, el artista goza de libertad plena, sin reglas ni cánones, pero asumiendo los riesgos de sus encuentros; puede experimentar con los más diversos materiales (lápices de plomo o de color, ceras, tinta china, témpera, imprimaciones, aguada…) sin miedo a equivocarse. En el caso de una persona tan dotada para el dibujo como Caballero, los resultados son a veces tan óptimos que los bocetos se convierten en obras definitivas.
Desde los años 50
José Caballero. Caminos de papel 1951-1991 abarca desde principios de los años 50, coincidiendo con su entrada de lleno en la pintura (primera exposición en la Galería Clan), hasta el final de sus días. Antes de 1950 había realizado sobre todo ilustraciones para libros y publicaciones, así como diseños para decoraciones teatrales y cinematográficas.
En las obras que conforman la muestra podemos seguir su alejamiento de la figuración y su entrada en la abstracción, campo en el que no dejará de investigar y experimentar. Una abstracción en la que de vez en cuando aflora de nuevo la figuración, generalmente geométrica.
Madrid. José Caballero. Caminos de papel 1951-1991. Círculo de Bellas Artes [1].
Del 10 de febrero al 3 de abril de 2011.
Comisario: Jesús Cámara.