El creciente reconocimiento, no exento de polémica, que el trabajo de Prince ha tenido en el mundo del arte lo ha convertido en uno de los artistas más observados y sobresalientes de la actual escena artística internacional.
Complejas relaciones
Prince especula estableciendo complejas relaciones y cortocircuitos entre elementos del mundo de la imagen y el de la palabra. A lo largo de su trayectoria es constante su interés por no excluir de una práctica artística –que se desvela como estudiosa de los grandes hitos de la historia del arte moderno al tiempo que muy renovadora–, los iconos de la cultura popular y los medios de comunicación, los mecanismos del humor y de la caricatura, la representación común de la mujer y del sexo en el mundo rural y trabajador de su país, la cultura del cine o el poder de la fotografía en la vida cotidiana.
Radical canibalismo
El artista estadounidense abordará en esta exposición a Picasso aplicando una táctica de «radical canibalismo» del genio malagueño que induce al espectador al extrañamiento. Este distanciamiento alerta a revisar percepciones y convenciones de la sexualidad, el erotismo o el deseo.
Con esta exposición el Museo Picasso Málaga cumple con una de sus misiones: abordar de frente la contemporaneidad como lo hizo Pablo Picasso con su tiempo, continuando con la línea expositiva iniciada con las exposiciones Bill Viola. Obras figurativas [1] (2010), y Kippenberger miró a Picasso [2] (2011).
Málaga. Richard Prince. Museo Picasso Málaga [3].
Del 27 de febrero al 27 de mayo de 2012.
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