Estos retablos tenían la función de amparar a los cuadros, que venían de fuera, por lo que en el momento de separarlos siempre se tuvo claro que aunque no fueran de Ribera podrían ser de cualquier otro gran pintor.
En los laterales de dos de estas obras se han descubierto las firmas de El Españoleto y, aunque uno está en "bastante mal estado", el de la Magdalena "se va a recuperar en un porcentaje muy alto", mientras que los otros dos se podrán ver "en su esplendor".
Obras muy valiosas
Martirio de San Lorenzo, Aparición del Niño Jesús a San Antonio de Padua y María Magdalena Penitente son los títulos de estas obras que Sánchez-Barriga ha calificado de “muy valiosas”, aunque en el momento de su descubrimiento se encontraban en pésimas condiciones y era muy difícil fijar su autoría. El proceso de recuperación costará 274.000 euros y durará en torno a dos meses.
El Martirio de San Lorenzo (1639) es una obra de extraordinario valor, no solo por la maestría del trabajo, sino por ambas firmas, que la dotan de un carácter documental. Por su parte, La Aparición del Niño Jesús a San Antonio de Padua es la única que no aparece con la firma de este pintor y todavía no ha podido ser contrastada hasta hoy con los ejemplares de El Escorial, aunque el lienzo entra en la mecánica de los trabajos de serie del obrador.
Por último, María Magdalena Penitente (1642), de extraordinaria calidad, se conserva en peores condiciones que los dos anteriores, aunque evidencia también la mano de este maestro.