La muestra, que se encuentra instalada a lo largo de la avenida de Broadway –probablemente la calle más famosa de Manhattan junto con la Quinta Avenida y sede de 39 teatros–, desde Columbus Circle hasta la calle 166, incluye 16 esculturas de bronce de gran tamaño, todas ellas con un cartel que muestra unos números de teléfono móvil para acceder,  en idioma Inglés y español, a las descripciones informativas de las obras.

Inspiración en maestros del pasado

Manolo Valdés se ha convertido en uno de los artistas españoles más importantes y respetados de la actualidad,  conocido especialmente por sus versiones de obras de maestros del pasado, como Zurbarán, Velázquez, Matisse o Lichtenstein, de modo que utiliza su trabajo como pretexto para crear un objeto estético completamente nuevo.

Por ejemplo, el grupo compuesto por seis grandiosas esculturas tituladas La Reina Mariana, cada una de ellas de casi 2,5 metros de altura y 500 k de peso, que representan a la famosa reina inmortalizada por Velázquez. Cuatro de ellas han sido colocadas, ahora con sus formas abstractas y simplificadas, en Columbus Circle y otras dos flanquean la entrada sur de la estación de metro de la calle 72, donde también ha sido instalada la obra titulada Odalisca 2006, cuyas sutiles formas hacen referencia a las obras de Henri Matisse y Pablo Picasso.

Otros puntos a destacar de la exposición son la serie de seis bronces monumentales, todos ellos mayores de 3,6 metros de altura, que representan diversas cabezas de mujer y el debut en Nueva York de dos esculturas ecuestres de Valdés, Dama a caballo I, y Caballero I, ambas de 2008 e inspiradas en los retratos de Velázquez.