En su exposición del MEIAC, la pieza producida por encargo de la Fundación Ortega Muñoz Laboratory to Ascertain Plausibility of Jim’s Basement Floor Anecdote (Laboratorio para investigar lo plausible del caso ocurrido en el sótano de Jim) es una evidencia más de que el proceso creativo de Herczka deriva metodológicamente de lo que se denomina un arte de base cognitiva (Knowledge Intensive Based Art).

El leitmotiv de la obra

En este caso, el leitmotiv de la obra es una reflexión sobre las estrategias de supervivencia de las especies o de resistencia de las formas de vida al stress ambiental.

La instalación realizada para la Fundación Ortega Muñoz parte de un análisis simbólico del comportamiento de una especie de pequeños peces vulgarmente designados por killifish. Este pez -en el caso de la instalación de de Mateusz perteneciente a la familia Rivulus punctatus- habita en zonas húmedas del sur de Estados Unidos, Cuba, etc., pero ha sido introducido por el hombre en extensas zonas de América Central y Sur, Península Ibérica y Australia por su capacidad para destruir los huevos y larvas del mosquito causante de la malaria. Otro aspecto interesante asociado al killifish es la inmensa red humana que actualmente protege su amenazada supervivencia.

Amantes del pez

Asociaciones de amantes del killifish pasan gran parte de su tiempo libre dedicados a estudiar y proteger la especie intercambiando información y ejemplares, clasificando sus inagotables variaciones de forma y color o ¡enviando huevos por correo! Esta especie de bio-hackers constituye una red social muy efectiva.

El abuso actual y cada vez más corporativo de la retórica de la sostenibilidad y de la imaginística verde (lo que en inglés se viene llamando green wash) encuentra en el activismo eco-filosófico de los amantes del killifish un importante e instructivo contrapunto. La intervención de Mateusz Herczka a este propósito ha sido revelar bajo una forma simbólica la complejidad de este fascinante universo de responsabilidad simbiótica.

Prueba documental

No existía hasta el momento prueba documental de los saltos de los killifish. La instalación, habitada por la familia Rivulus punctatus, demuestra -en una analogía típica de un experimento científico- que sí saltan. Pero esta demostración, al darse como obra de arte, amplifica el alcance cultural de su verdad ecológica implícita.

En Laboratorio para Investigar lo Plausible del Caso Ocurrido en el Sótano de Jim, Mateusz desarrolla en realidad una obra muy compleja, cruzando reflexiones sobre la supervivencia de las especies, la amenaza humana al equilibrio ecológico de la Tierra y, por lo tanto a su propia existencia, con ideas poderosas alrededor de las nociones de resistencia cultural, dialogo, adaptación, metamorfosis, estrategias morfogenéticas de supervivencia, comunidades sociales y colaboración entre especies.

La muestra, que incluye además otros trabajos como Vanda (2005), 110 36 ZUIDVLEUGEL (2007) y Eindhoven (2008), ha sido comisariada por el crítico portugués Antonio Cerveira Pinto.

 

Badajoz. Mateusz Herczka. Museo Extremeño e Iberoamericano de Arte Contemporáneo (MEIAC).

Hasta el 30 de agosto de 2009.

Comisario: Antonio Cerveira Pinto.