El aire aún no respirado -título inspirado en una idea del matrimonio Smithson para la “casa del futuro”- muestra diferentes motivos que pueblan superficies heterogéneas y que, en principio, resultan de una compleja interpretación. En ellos, De Miguel muestra imágenes aparentemente inconexas, suspendidas en el vacío de la superficie, combinando desde imágenes oníricas a espacios arquitectónicos que, tras una segunda lectura, comienzan a desvelarse.
Arquitectura de recuerdos
La obra de Regina de Miguel, basada fundamentalmente en dibujos, pinturas, maquetas y vídeos, reflexiona sobre la habitabilidad de espacios, en los que está implícito el viaje y sus percepciones del lugar. Su obra está construida sobre sus propias experiencias y percepciones, como una especie de arquitectura de recuerdos que remiten al mundo de la memoria.
Sus dibujos, realizados indistintamente en lápiz sobre papel o digitalmente, y pinturas acrílicas de un exquisito trazo, casi invisible, esbozan referencias cartográficas urbanas que se apoyan sobre un escenario metafórico que se descifran en las leyendas de estos mapas. Pone así de manifiesto la multiplicidad de relaciones y variables que componen la realidad del individuo y los distintos vínculos con su entorno con la precisa meticulosidad de un científico, como si se tratase de mediciones de estados mentales y sentimentales.
Para esta exposición, Regina de Miguel muestra también una maqueta de un espacio reconstruido y un vídeo que se proyecta en su interior y desvela la memoria de lo habitado.
El Laboratorio 987, sala de proyectos artísticos específicos del MUSAC se presenta como un espacio anexo que funciona independientemente a la programación general del Museo.
León. El aire aún no respirado. Regina de Miguel. Laboratorio 987. MUSAC [1].
Comisario: Tania Pardo
Hasta el 11 de enero de 2009.