La intención de la muestra, que incluirá más de 1.000 trabajos entre fotografías, revistas, libros y películas, es crear un relato que explique cómo se constituyeron espacios públicos mediante la fotografía documental proletaria, que se mostró antagónica al modelo burgués gracias a su elevado componente de denuncia social. Se pretende así darle a este movimiento la importancia que merece dentro de la historia de la fotografía.
Originales de la época
Una luz dura, sin compasión se divide en tres grandes secciones que narran la evolución del movimiento entre Alemania y la Unión Soviética, el desarrollo por Europa y Norteamérica y el compromiso internacional en España, donde, a pesar de que no hubo un movimiento de fotografía obrera, sí se produjo una importante presencia de fotógrafos extranjeros que trasladaron la praxis del movimiento a la península.
Entre los fotógrafos presentes destacan Gerda Taro, Eugen Heilig, John Heartfield, Max Alpert, Arkady Shaikhet, Paul Strand, Tina Modotti, Henri Cartier-Bresson, Eli Lotar, Aaron Siskind, Harold Corsini, Morris Engel, Sid Grossman o Walter Reuter.
Las fotografías expuestas son, siempre y cuando ha sido posible, copias originales de la época. La muestra se complementa con un vasto acervo de material documental, especialmente libros y revistas, así como piezas fílmicas entre las que se encuentra Las Hurdes, tierra sin pan, de Luis Buñuel.
Madrid. Una luz dura, sin compasión. El Movimiento de la Fotografía Obrera 1926–1939. Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía.
Del 6 de abril al 22 de agosto de 2011.