La exposición está integrada por aproximadamente 210 figuras procedentes del Museo del Louvre, que cuenta con una de las colecciones más completas del mundo.
La selección de piezas mostrada en Valencia destaca no sólo por su valor cultural y artístico sino también por la posibilidad que abre al visitante de conocer usos y costumbres de la vida cotidiana en la época de la Grecia clásica.
El descubrimiento
Estas estatuillas griegas de terracota policromada deben su nombre de Tanagras al lugar donde se descubrieron de manera fortuita durante el invierno de 1870-71, cuando fueron halladas por unos campesinos en los campos y colinas que rodean el actual emplazamiento arqueológico de Grimadha, en Beocia, región al norte de Atenas.
Las estatuillas de terracota, y el arte de Beocia en particular, eran ya conocidos en esa época, pero estas representaciones se distinguían por su calidad en la escultura, su gracia y sobre todo por su aspecto tan familiar para la sociedad de finales del siglo XIX, entre la que pronto triunfaron.
Las Tanagras se convirtieron de este modo en el símbolo de una nueva antigüedad que mostraba, a través del perfil de sus mujeres, jóvenes y niños, la cotidianidad de la vida. Todos los grandes museos europeos y coleccionistas empezaron a disputarse estas piezas.
Rápido hechizo
Desde su aparición, las Tanagras se benefician de una publicidad considerable, en especial en la Exposición Universal de París de 1878. Las figuritas se convirtieron en objeto de deseo de los coleccionistas burgueses, quienes se sentían hechizados por la delicadeza de las obras.
Los marchantes atenienses monopolizaron rápidamente el mercado, estableciéndose como únicos intermediarios entre los campesinos de la región y los posibles compradores, e incluso patrocinando algunas exposiciones. El entusiasmo por las Tanagras conlleva, desde 1880, la multiplicación de los participantes en el negocio. En medio de esta fuerte competencia por la adquisición de las Tanagras, el Louvre se convirtió en el primer museo europeo en adquirir estas piezas en 1872.
Lazos de colaboración
La muestra está comisariada por Violaine Jeammet, conservadora jefe del Departamento de Antigüedades Griegas, Etruscas y Romanas del Louvre, y ocupará las dos salas de exposiciones del centro cultural valenciano. Con esta exposición, la Obra Social de Bancaja consolida su colaboración con el Louvre, iniciada en el año 2008 con la muestra Tres Imperios del Islam. Estambul, Isfahán, Delhi, que permitió exponer en Valencia fondos de arte islámico de la pinacoteca francesa.
Con motivo de la exposición, se ha editado un catálogo de 300 páginas que analiza tanto la vertiente histórica como la artística de estas figuras de terracota. Sus artículos incorporan los últimos descubrimientos científicos alrededor de las Tanagras y los más recientes descubrimientos.
Valencia. Tanagras. Figuras para la vida y la eternidad. Centro Cultural Bancaja [1].
Del 29 de marzo al 7 de julio de 2010.
Comisaria: Violaine Jeammet.
IMÁGENES DE MUESTRA
Dama de azul. Museo del Louvre
Tanagra, 330-300 a. C
La Sofocleana. Museo del Louvre
Tanagra, 330-300 a. C