El recorrido, que en esta ocasión se concentra en los Espacios A y B, incluye diferentes momentos creativos que ilustran la evolución de tipologías, técnicas y materiales utilizados por Tàpies.
El interés del artista por las texturas y por el valor expresivo de determinados materiales –diferentes a los habituales en el mundo artístico académico–, como por ejemplo polvo de mármol, arena, tierra u otros, deviene la característica más relevante de su trabajo. Este interés se puede apreciar en obras tan primerizas como Zoom (1946), en estadios intermedios, como en Tierra y pintura (1956), y en obras que pertenecen al período de madurez, como Marrón con dos papeles laterales (1975), Libro-muro (1990) y Materia y cartones (2006), por mencionar solo algunas.
Del entorno cotidiano
Tàpies ha ido configurando unas imágenes comunes, generalmente extraídas del entorno cotidiano, que aparecen en las diferentes etapas de su producción artística: objetos de la vida diaria, pero también partes del cuerpo tradicionalmente consideradas poco atractivas, son tratados en las obras de Tàpies con la voluntad de mostrar el valor de todas las cosas, aunque sean sencillas o pobres.
La imagen del pie es especialmente importante, puesto que ha sido representada de distintos modos, desde la representación icónica del pie hasta la huella, pasando por la representación del calcetín o del zapato y, en diferentes épocas, desde la aparición en obras anteriores a las pinturas matéricas hasta la actualidad. Podemos encontrar ejemplos en Cama marrón (1960), Materia en forma de pie (1965) y Planta de pie (1984), entre otras.
Vocación política
La muestra también pone de manifiesto la vocación política de Tàpies, acentuada a finales de la década de 1960 y durante la de 1970, visible en este caso en una tela de 1976, Composición con números, creada en memoria del activista Oriol Solé i Sugranyes, abatido por la Guardia Civil tras huir del penal de Segovia en abril del mismo año.
De igual forma, también evidencia la afinidad que el artista siente por la música, a la que considera como un medio expresivo muy puro con un gran poder de evocación. Desde la admiración de Tàpies por la música de Bach, Brahms y, sobre todo, Wagner, hasta su interés por la música electrónica.
Barcelona. Antoni Tàpies. Colección. Fundación Antoni Tàpies [1].
Hasta el 25 de septiembre de 2011.