Harmonía, un pueblo abatido por aburridas exigencias alimenticias, se rebela contra la tiranía del pan en busca de un nuevo modelo social, basado en el deleite y la sensualidad. Sus habitantes, sujetos hastiados en una sociedad hambrienta de nuevas sensaciones, son guiados por Concordia, la voz de la revolución, hacia los manjares de un mundo que se apaga…
Experimentación sensitiva
Harmonía, una ópera comestible es un proyecto basado en la experimentación sensitiva y el sustento de la imaginación. Estos conceptos se suman a las disciplinas clásicas que integran el género de la ópera, como música e interpretación y otras artes plásticas y escénicas.
El sentido del gusto, piedra de toque de esta iniciativa, se incorpora al espectáculo por medio de elementos comestibles y olfativos que el público consume en una degustación conceptual, convirtiéndose en una pieza más del engranaje escénico y que enriquece la experiencia artística en su conjunto.
Ensayo general
El proyecto se desarrolla gracias a la colaboración de Espada & Monleón con un grupo de investigación formado por creadores contemporáneos de diferentes países, alumnos y profesores de la Facultad de Bellas Artes de Madrid, y contando con el asesoramiento de profesionales gastronómicos. Una primera versión de la Ópera comestible se representó el pasado verano en la azotea del Centro de Arte Dos de Mayo (Móstoles, Madrid) en forma de ensayo general con una gran acogida por parte del público.
Este año, Harmonía, una ópera comestible se pondrá en escena en Matadero Madrid en dos únicas funciones, con un espectáculo renovado y una producción especialmente diseñada para la ocasión, con el afán de acercar a un amplio público este cúmulo de sensaciones: la historia del ascenso y caída del estado de Harmonía.