¿Sabía que el olor corporal de Miguel Ángel era tan insoportable que sus ayudantes tenían problemas para trabajar a su lado; que, durante algunas épocas de su vida, Van Gogh se comía la pintura con la que realizaba sus obras; que a Georgia O´Keeffe le gustaba pintar desnuda; que tras un ácido artículo Édouard Manet retó a duelo a un crítico y que tras herirle ligeramente en el pecho y ante la absoluta falta de destreza de ambos con la espada, la cosa quedó resuelta con un apretón de manos
La periodista Elizabeth Lunday, especialista en arte, diseño urbano y arquitectura, nos revela la apasionada y cruda imagen de 35 conocidísimos artistas (Goya, Picasso, Diego Rivera, Frida Kahlo, Dalí, Edward Hopper, entre muchos otros) a través de los hechos y aspectos insólitos que marcaron sus vidas.
De crisis en crisis
No todos los artistas tuvieron vidas tumultuosas y atormentadas, señala la autora de este peculiar historia. «De hecho muchos vivieron de una manera bastante vulgar, disfrutaron del éxito de sus carreras y murieron a su debido tiempo. Pero algunos de los más famosos fueron dando tumbos de crisis en crisis… algunos desarrollaron graves adicciones… unos cuantos estuvieron fichados como criminales… En este libro he reunido sus historias más escandalosas».
Realmente un buen puñado de ellas lo son y queda en el ánimo y el derecho de cada cual asumirlas o no como verdades irrefutables. Pero, en cualquier caso, es recomendable adentrase en el ejercicio provocador que plantea el enfoque de estas Vidas secretas porque, como apunta su propia autora, al final quizá deberíamos estar contentos de que la mayoría de los artistas murieran de alguna cosa que no fuese aburrimiento. «Muchos de ellos vivieron al límite del caos, allí donde nace el gran arte»,
Vidas secretas de grandes artistas
(Lo que nunca se reveló de los maestros de la pintura y de la escultura)
Elizabeth Lunday
Ilustraciones Mario Zuca
Traductor: David Cifuentes
316 páginas