En 1979, Duffy decidió dejar la fotografía y quemó sus negativos. En esta exposición se muestran algunas de las fotografías que se han podido recuperar, entre hojas de contactos, retratos, sesiones, reportajes y anuncios realizados para revistas y periódicos del mundo entero. También se incluyenn algunas obras de la colección personal de Duffy y cajas de negativos que han sido recientemente restaurados.
Junto a David Bailey y Terence Donovan, Duffy es reconocido como uno de los innovadores de la fotografía documental de moda; un estilo que revolucionó su iconografía y el de su industria. Tan influyentes fueron sus imágenes que en 1962 el Sunday Times denominó el «Trío Terrible» a Duffy, Bailey y Donovan. Más tarde, Norman Parkinson los llamó la «Trinidad Negra».
Moda y publicidad
Durante los años 50, 60 y 70, Duffy produjo un extenso y extraordinario conjunto de obras que englobaba todos los géneros fotográficos, desde retratos a reportajes o anuncios publicitarios. Así pues, su cámara recogió desde las estrellas de Hollywood, como Michael Caine, Brigitte Bardot, Julie Andress o Sidney Poitier; a los grandes del rock, como John Lennon, David Bowie y Debbie Harry (Blondie); pasando por las bellezas de los sesenta, como Jean Shrimpton o Joanna Lumley.
La muestra se estructura en varias secciones organizadas por los diferentes géneros tratados por el fotógrafo: Faces / Rostros (retratos de celebrities de la época), David Bowie Series (Aladdin Sane, Scary Monster, White Sand, etc.), Moda (reuniendo los trabajos para Vogue, Elle France, etc.) y Publicidad (Benson & Hedges, Smirnoff, Konika, Johnny Walker, Pirelli y otras marcas).
Además de estas series de fotografías en diversos formatos, la exposición se complementa con textos del autor; varios audiovisuales; el documental que la BBC realizó sobre el artista antes de morir (The Man Who Shot The Sixties); una banda sonora que incluye piezas musicales de los grupos y solistas de la época dorada de Duffy, y una zona de documentación que incluye cámaras originales del artista, pasaportes, hojas de contactos, manuscritos, memorabilia, revistas de la época con las fotografías o anuncios reproducidos y material diverso.
El hombre que retrató los 60 Tras una infancia marcada por la Segunda Guerra Mundial, Brian Duffy ingresó en la escuela de Arte St. Martins en 1950. Después de empezar Pintura, cambia ésta por el diseño de moda. Termina en 1953 e inmediatamente comienza a trabajar como asistente de diseño de Susan Small Dresses. Después, en una visita a París, se le ofrece un trabajo en Balenciaga, que no pudo aceptar. En 1955 comienza a trabajar independientemente para Harper’s Bazaar. Es aquí donde entra en contacto con la fotografía. Inspirado por las hojas de contactos fotográficos que pasan por el escritorio del director de arte, decide buscar un trabajo como asistente de fotógrafo. Como asistente de Adrian Flowers recibe su primer encargo de Ernestine Carter, editor de moda de The Sunday Times. En 1957 es contratado por la edición británica de Vogue, donde permanece hasta 1963. Durante este período trabaja en estrecha colaboración con las top models de la época, incluyendo a Joy Weston, Jennifer Hocking, Stone Paulene y Jean Shrimpton. Junto con sus compañeros fotógrafos David Bailey y Terence Donovan, captura, y en muchos sentidos ayuda a crear, el “Swinging London” de la década de 1960: una cultura chic de la alta moda y de celebridades. Estos tres fotógrafos son bautizados por la prensa británica como los “Terrible Trio” o el “Black Trinity”, por el color de sus imágenes, y no sólo redefinieron la estética de la fotografía de moda, sino también el lugar del fotógrafo dentro de la industria. Además de Vogue, Duffy también ha trabajado para publicaciones como Glamour, Esquire, la Town, Queen, The Observer, The Times y The Daily Telegraph. También para la francesa Elle durante dos períodos, el primero entre 1963 y 1968 y el segundo entre 1971 y 1979. Al mismo tiempo que la fotografía de moda, Duffy es la fuerza creativa que hay detrás de las portadas de tres de los álbumes de David Bowie, siendo la más conocida la de Aladdin Sane. Duffy también tiene éxito en el mundo de la publicidad con las campañas de Benson & Hedges y Smirnoff de los años 70. En 1965, se le encarga crear el calendario Pirelli, que se llevó a cabo en Mónaco. Él también es el encargado de realizar un segundo calendario en el año 1973, en colaboración con el artista pop británico Allen Jones. En 1967 funda una productora de cine con Len Deighton llamada Deighton Duffy y produce la adaptación cinematográfica de un libro de Deighton y del musical Oh! Qué guerra tan encantadora, estrenada en 1969. En 1979 decide dejar la fotografía y quema la mayor parte de sus negativos, aunque algunos se salvaron del fuego. A pesar de que un gran número de sus imágenes se han perdido, las que permanecen constituyen una historia visual de 25 años de la moda y de la cultura británica. En 2009, a instancias de su hijo Chris, Duffy vuelve a trabajar como fotógrafo y retrata de nuevo a personajes que ya había fotografiado en la década de los 60 y 70. La historia de los inicios de su carrera y su regreso se recoge en un documental de la BBC que se estrena en enero de 2010 titulado The Man who Shot the 60’s. Duffy muere el 31 de mayo de 2010 a consecuencia de una enfermedad pulmonar degenerativa. En 2011, el Victoria and Albert Museum de Londres solicita a los herederos copias de fotografías para su exhibición permanente. |
Zaragoza. Duffy. Retrospectiva. Centro de Historias de Zaragoza.
Del 6 de septiembre al 11 de noviembre de 2012.